Lee en Árbol de tinta: ¿Todos podemos hacer filantropía?
- Camilo Yepes
La más reciente edición de la revista digital institucional Árbol de tinta es el cumplimiento de una premisa: toda acción cuenta en la filantropía, desde la palabra más acertada hasta el apoyo en el camino a un próximo profesional.
En sus artículos y a partir de testimonios, historias y entrevistas, el mensaje principal de la publicación radica en esa razón poderosa que impulsa el esfuerzo diario para brindar las herramientas que los jóvenes necesitan para contribuir a su territorio.
Un ejemplo fehaciente es el de Alexander Cruz Martínez, decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas, quien cuenta cómo esa suma de voluntades fue crucial para labrar su camino profesional.
Un ejemplo fehaciente es el de Alexander Cruz Martínez, decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas, quien cuenta cómo esa suma de voluntades fue crucial para labrar su camino profesional.
La filantropía debería ser un virus bueno, que se disemina por la sociedad. Cada acto significa quedar vacunado en favor de seguir haciendo actos de filantropía".
Más de 30 páginas: más de dos razones
Al leer este número, todo lector podrá interactuar con incontables maneras de ayudar; por ejemplo, la misma filosofía de Unibagué con su fundación y la creación de la Unidad de Filantropía en 2020, cuando las condiciones se hicieron difíciles para centenares de jóvenes en la región.
Por ejemplo, Bibiana Lucía Barreto, directora de la Unidad, explica que "aquí, la filantropía no es solo una vocación de servicio, sino un compromiso social profundamente arraigado que busca generar un impacto positivo y duradero".
(Un sello sustentable para Ciencias Económicas)
Y lo demuestra el empresario Germán Cano Sanz, quien expone más de dos razones frente a la necesidad de la cultura filantrópica, en la que "no hay que ser un magnate para ayudar, porque muchas personas haciendo pequeños aportes tienen gran impacto".
Al leer este número, todo lector podrá interactuar con incontables maneras de ayudar; por ejemplo, la misma filosofía de Unibagué con su fundación y la creación de la Unidad de Filantropía en 2020, cuando las condiciones se hicieron difíciles para centenares de jóvenes en la región.
Por ejemplo, Bibiana Lucía Barreto, directora de la Unidad, explica que "aquí, la filantropía no es solo una vocación de servicio, sino un compromiso social profundamente arraigado que busca generar un impacto positivo y duradero".
(Un sello sustentable para Ciencias Económicas)
Y lo demuestra el empresario Germán Cano Sanz, quien expone más de dos razones frente a la necesidad de la cultura filantrópica, en la que "no hay que ser un magnate para ayudar, porque muchas personas haciendo pequeños aportes tienen gran impacto".
Consulta el reciente número de Árbol de tinta en Ediciones Unibagué
